Las organizaciones mineras son un sector clave para la economía chilena, representando el 14,6% del PIB del país. Ante esto, las empresas enfrentan desafíos significativos, incluyendo los altos costos y la complejidad de implementar automatización y digitalización, vulnerabilidades en ciberseguridad, dificultades en el mantenimiento predictivo debido a la necesidad de datos y análisis avanzados, complicaciones en la optimización de procesos, y monitoreo ambiental.
El especialista Nicolás Ahumada, gerente de Smart System de TIVIT, sostuvo: “Junto con estas nuevas tecnologías, no podemos dejar fuera el medio que se utiliza para recopilar la información y el análisis de los datos obtenidos en terreno, dado el creciente uso de sistemas autónomos o remotos en la operación”.
A través de esto, las compañías pueden modernizar sus procesos y sus plantas de extracción, incluir mayor tecnología en la búsqueda de nuevos yacimientos, generar prácticas sostenibles, recuperar los sitios que han sido impactados por el desarrollo de la minería y cumplir con las regulaciones medioambientales. En particular, la explotación del litio se presenta como una oportunidad significativa para Chile, con un crecimiento anual proyectado del 15,5%.
Bajo la misma línea y de acuerdo con el informe “Proyección de la producción esperada de cobre en Chile 2023 – 2024”, se calcula un crecimiento anual de 1,7% desde el año pasado (2023). Para 2029 se estima el nivel más alto con 6,87 millones de toneladas de cobre. En cuanto a 2034, esta cifra bajará, pero se mantendrá sobre los 6,43 millones de toneladas.
En respuesta a las crecientes necesidades tecnológicas del sector minero, se han desarrollado diversas soluciones avanzadas que están transformando la industria. Estos recursos incluyen la operación y mantención de sistemas SCADA en importantes divisiones mineras como Andina, Chuquicamata y Ministro Hales, proporcionando un control y monitoreo precisos de los procesos mineros