En su más reciente conferencia de resultados, Charle Gamba, CEO de Canacol Energy, destacó los avances del proyecto Natilla dentro de su estrategia exploratoria en el Valle del Magdalena en Colombia.
La iniciativa, que enfrentó desafíos técnicos en su fase inicial en donde se debió abandonar uno de los pozos tras una elevada inversión, ha sido rediseñada para convertirse en un pilar de la producción gasífera colombiana en los próximos años.
El ejecutivo detalló los aprendizajes obtenidos en Natilla 2, donde problemas de estabilidad en el pozo impidieron completar la instalación de tuberías de producción, pese al descubrimiento de entre cinco y seis mantos de arena con gas en las formaciones Porquero y Tier 2.
Para la próxima fase, Natilla 3 programada para 2026, el ejecutivo de la compañía anunció que implementará mejoras sustanciales en el diseño de perforación.
Entre las innovaciones técnicas destacan un diámetro de pozo más amplio para facilitar la colocación de tuberías y un casing más estrecho específicamente en la zona de Porquero, medidas que buscan mitigar los riesgos geotécnicos identificados. «Natilla 2 nos dejó una valiosa confirmación de reservas y un manual de soluciones para monetizar este activo», explicó Gamba durante su presentación.
Doble apuesta exploratoria
Paralelamente a Natilla, Canacol avanza con el pozo Valiente 1 en el contrato VMM 10-21 de la Cuenca Media del Magdalena, cuya perforación comenzará en octubre próximo.
Este prospecto, situado a apenas cinco kilómetros del histórico campo Opón -descubierto en 1965- apunta a las mismas areniscas productivas de la formación La Paz, pero a menor profundidad (aproximadamente 6.000 pies). Los resultados de esta perforación, que podrían significar un importante incremento en las reservas certificadas, se conocerán hacia finales de 2025.
Expansión regional con foco en Bolivia
Más allá de las fronteras colombianas, Canacol amplía su desembarco en el mercado boliviano con cuatro contratos en proceso de ratificación legislativa (Arenal, Bay, Florida y Tita). El plan operativo contempla la reactivación de pozos inactivos en el campo Tita durante 2026, con posibilidad de iniciar producción comercial en 2027.
«Bolivia representa para nosotros la oportunidad de replicar el modelo exitoso implementado en Colombia, llevando gas sostenible a mercados con demanda creciente», señaló el directivo.
Canacol en cifras
En el frente económico, la compañía mantendrá su nivel de inversión en el rango alto de lo previsto para 2025, con aproximadamente US$160 millones en capital de trabajo. De este monto, US$53 millones se ejecutarán durante el tercer y cuarto trimestre, con énfasis en los nuevos desarrollos.
En cuanto a producción, el segundo trimestre cerró con un promedio de 124 millones de pies cúbicos diarios (mmcfd), de los cuales 119 mmcfd correspondieron a ventas contractuales.
La diferencia, explicó Gamba, se atribuye al consumo en procesos de compresión. Los nuevos pozos Palomino 1 y Freser 5, que entrarán en operación durante el último trimestre del año, agregarán aproximadamente 37 mmcfd a la capacidad productiva, generando un impacto estimado de US$9 millones mensuales en el Ebitda.