Orla Camino Rojo ha sido reconocida con el prestigioso Sello WIM Nivel Oro, un distintivo que avala su compromiso activo con la equidad de género y la promoción del talento femenino en la industria minera. Esta distinción, entregada por Doris Vega, Presidenta del Comité Directivo Nacional de Mujeres WIM México, consolida a la empresa como un referente nacional en la construcción de una minería más inclusiva y sostenible.
Además del Sello WIM, la compañía recibió el Reconocimiento al Mérito al Compromiso, una mención especial por su estrategia de socialización transversal del Sello. Este enfoque involucró desde la alta dirección hasta las áreas operativas, integrando a toda la plantilla en una cultura de respeto, equidad y crecimiento profesional.
Inclusión real desde todos los frentes
El enfoque de Orla Camino Rojo no se limita a una política institucional. Se trata de una transformación organizacional que ha dado resultados palpables. Más mujeres acceden hoy a puestos operativos y estratégicos, lo que ha permitido equilibrar la representación y dar paso a un liderazgo diverso en todos los niveles.
Durante la ceremonia de entrega del Sello, celebrada en las instalaciones de la Compañía, las trabajadoras de Orla Camino Rojo fueron reconocidas como agentes clave de cambio. Su participación activa y profesionalismo refuerzan los pilares de una minería moderna que apuesta por la innovación desde la diversidad.
Un compromiso con impacto
El mensaje del corporativo fue claro: “Estos reconocimientos reafirman nuestro compromiso con una minería más inclusiva, equitativa y sostenible, alineándonos con los objetivos que promueven la igualdad de oportunidades en todos los niveles”.
Este tipo de esfuerzos no solo benefician a las mujeres dentro de la empresa, sino que también generan un impacto positivo en las comunidades y en toda la cadena de valor de la industria.
¿Por qué importa este reconocimiento?
El Sello WIM es una herramienta poderosa para impulsar cambios estructurales en las empresas mineras. El nivel Oro, en particular, se otorga a aquellas organizaciones que demuestran acciones sostenidas y resultados tangibles en la promoción de la equidad de género. Es una garantía de que los principios de inclusión no solo están escritos, sino que son parte del día a día.
Este avance es significativo si consideramos que la minería ha sido históricamente una industria predominantemente masculina. Iniciativas como las de Orla Camino Rojo rompen paradigmas y abren nuevas rutas para el talento femenino, tanto en México como a nivel internacional.
Hacia una minería más humana y competitiva
La experiencia de Orla Camino Rojo demuestra que la equidad no está reñida con la productividad. Al contrario, fomentar un entorno justo y diverso potencia la innovación, mejora el clima laboral y fortalece el posicionamiento de la empresa frente a inversionistas, comunidades y reguladores.
A través de este tipo de acciones, la minería se convierte en un motor de transformación social, capaz de generar riqueza económica sin perder de vista su responsabilidad humana y ambiental.