En el panorama minero de México, 2025 se perfila como un año clave para consolidar estrategias que permitan al sector enfrentar sus retos históricos y mantener su relevancia como uno de los pilares de la economía nacional. El Ingeniero Rubén del Pozo Mendoza, presidente de la Asociación de Ingenieros de Minas, Metalurgistas y Geólogos de México (AIMMGM), destacó las acciones emprendidas y las preocupaciones actuales que afectan al sector.
Un sector estratégico en cifras
México ocupa una posición destacada en la producción global de minerales. Es líder mundial en la producción de plata, fluorita y wollastonita, y está en el «top 16» de minerales como oro, plomo, zinc, cobre y sal. Las cinco entidades con mayor producción son Guerrero, Zacatecas, Chihuahua, Durango y Sonora, donde se concentran importantes proyectos mineros.
Sin embargo, el Ingeniero del Pozo alertó sobre una disminución significativa en la inversión en exploración. De 1,165 millones de dólares en 2012, la cifra cayó a 606 millones en 2023, una contracción del 48%. “La exploración es el motor de la minería. Si no generamos reservas hoy, en unos diez años podríamos enfrentar un punto crítico”, afirmó. Este fenómeno también ha impactado el número de proyectos mineros, que pasaron de 1,218 en 2022 a 762 en 2023, de los cuales 391 están postergados.
Eventos clave para el sector en 2024
El calendario de la AIMMGM ha estado repleto de actividades que buscan fortalecer al sector:
– Congreso Internacional Minero Sinaloa 2024 (marzo, Mazatlán): reunió a 3,000 convencionistas y destacó innovaciones tecnológicas.
– XIV Conferencia Internacional de Minería (abril, Chihuahua): con una participación de 4,000 asistentes.
– Foro «Retos de la Minería Mexicana» (mayo, CDMX): un espacio para reflexionar sobre los desafíos del sector.
– Reunión Internacional de Minería (junio, Zacatecas): atrajo a 5,000 convencionistas.
– VIII Congreso de Minería Durango 2024 (agosto, Durango): centrado en la inclusión y el desarrollo tecnológico.
Un llamado a la inversión y políticas públicas
El Ingeniero del Pozo hizo hincapié en que la minería enfrenta retos estructurales. La suspensión de concesiones de exploración y la falta de agilidad en permisos son temas prioritarios. Además, el país ha caído del lugar 11 en 2011 al 74 en 2023 en el índice de atracción de inversión del Instituto Fraser. “Es fundamental que las leyes secundarias flexibilicen aspectos de la exploración para reactivar el interés de los inversionistas”, sostuvo.
Un tema recurrente es la prohibición de la minería a cielo abierto. “La elección del método de extracción depende de las características del yacimiento. Si no se permite este tipo de minería, muchos proyectos quedarían inviables”, explicó.
Impacto social y ambiental
La minería genera 416,875 empleos directos, con salarios 33% superiores al promedio nacional, y de manera indirecta se superan los 3 millones de puestos de trabajo. Además, el 18% de estos empleos son ocupados por mujeres, lo que refleja un esfuerzo hacia la inclusión. En términos ambientales, el sector ha implementado prácticas sostenibles, aunque enfrenta retos en su percepción pública. “Es momento de comunicar mejor lo que hacemos. La minería es un motor de desarrollo, especialmente en regiones como el semidesierto, donde hay pocas alternativas económicas”, enfatizó del Pozo.
Perspectivas hacia 2025
El plan estratégico incluye eventos como el Encuentro de Secretarios de Desarrollo Económico (marzo) y la XXXVI Convención Internacional de Minería (noviembre, Acapulco). Este último busca reactivar la economía del puerto tras los daños por huracanes recientes.
El futuro del sector depende de un enfoque colaborativo entre gobierno, empresas y comunidades. “Es momento de unir esfuerzos para que México recupere su lugar como destino atractivo para la inversión minera”, concluyó el Ingeniero del Pozo.
