Petroperú: Sindicalistas anuncian paro por demora en nombramiento de directorio

El sindicato de trabajadores de Petroperú ha anunciado un paro de 48 horas como precursor de una huelga indefinida, en respuesta a la demora del gobierno en nombrar un nuevo directorio. Sin embargo, no han explicado cómo la falta de directores afecta el desempeño de los empleados de la empresa.

Óscar Vera, un líder sindical, ha estado impulsando la designación de directores que favorezcan los intereses del sindicato, proponiendo a Alejandro Narváez como presidente del nuevo directorio. Narváez ha criticado abiertamente a la gestión anterior, minimizando las dificultades que enfrenta Petroperú.

Luis Camino, coordinador general de la Coalición Nacional de Sindicatos de Petroperú, destacó que la empresa no cuenta con un directorio desde hace más de 45 días. «Sin un rumbo definido, los ministros han demostrado incapacidad. Creemos que esto es un sabotaje a la primera empresa del país. Los trabajadores están cansados de esperar y exigen que se justifique el nombramiento del directorio», expresó.

El sindicato ha solicitado una mesa de trabajo urgente con la presidencia y el premier para dialogar sobre soluciones para Petroperú. «Estamos advirtiendo que hay un problema serio que necesita atención», añadió Camino.

Los trabajadores han dado un plazo de 72 horas al gobierno para designar un nuevo directorio. Si no se cumple, se llevará a cabo un paro nacional de 48 horas, que precederá a una huelga general indefinida. Camino anunció que más de 1,000 trabajadores se unirán a la protesta.

El líder sindical subrayó que no se oponen a las decisiones del gobierno, siempre que las políticas sean claras y transparentes. «Es inaceptable que para un PMO se haya alertado a la empresa con nombres concretos. Si se busca una administración privada, esto implica que como Estado no somos capaces de gestionar la empresa», afirmó.

Por último, Camino recordó que el Estado tiene una deuda con Petroperú de más de S/16,000 millones por el fondo de estabilización, el IGV de la selva y los seguros no pagados por los derrames en el Oleoducto Norperuano.

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