En Chile y Latinoamérica la industria minera enfrenta desafíos significativos para reducir su impacto ambiental y avanzar hacia un modelo sostenible, posicionándose como una necesidad apremiante por su papel fundamental en la transición energética y la descarbonización.
Según el informe “Unearthing Tomorrow: Trends shaping the future of mining de State of Play (2023)”, el 50% de los encuestados afirmó que las preocupaciones ambientales son las tendencias de la industria que tendrán el mayor impacto en la minería durante los próximos 15 años. Adicional a esto, no es sorprendente ver que el 71% de los ejecutivos encuestados mencione que la transición energética es un impulsor principal de su estrategia corporativa.
En relación con lo anterior y frente a este panorama, Sergio Ferrari, director para Sudamérica del segmento de Minería, Minerales y Metales (MMM) de Schneider Electric, destaca la importancia de la tecnología y la digitalización como pilares para avanzar hacia la descarbonización en la minería. “Contar con infraestructuras tecnológicas que optimicen los procesos, aumenten la eficiencia y protejan el medioambiente, es clave”, enfatiza.
Este enfoque se refleja en la “Hoja de Ruta: Digitalización para una Minería 4.0” presentada por la Fundación Chile, el Consejo Minero y la Corporación Alta Ley, donde se subraya cómo las tecnologías avanzadas pueden revolucionar la industria al reducir la variabilidad y aumentar la resiliencia operativa. Además, facilita la viabilidad de operaciones mineras más complejas y con menores leyes de mineral, mejora la seguridad, promueve el desarrollo de talento especializado y ofrece soluciones a los desafíos ambientales que enfrenta el sector.
En relación con lo anterior resulta importante destacar que, actualmente, la industria minera en Chile está en pleno proceso de adopción de tecnologías innovadoras, como Big Data, camiones autónomos y equipos de operación segura con mínima intervención humana. Asimismo, la automatización de procesos mediante Centros Integrados de Operación (CIO) también está avanzando, marcando una transición hacia métodos más eficientes y sostenibles.
Además, el compromiso de Chile con la sostenibilidad y su objetivo de alcanzar la neutralidad de carbono para 2050 están impulsando a las empresas mineras a formar alianzas estratégicas con proveedores de tecnología y expertos del sector. Schneider Electric, por ejemplo, está colaborando con diversos actores para desarrollar e implementar soluciones integrales que cumplen con los estándares ambientales internacionales y fomentan la innovación. Este enfoque colaborativo es clave para enfrentar los desafíos ambientales y avanzar hacia una minería más verde y eficiente en la región.
En pro de este objetivo, la compañía aporta a la minería entregando entornos digitales colaborativos que integran la automatización y el análisis de procesos, la electrificación y las microrredes, conectando distintas áreas del negocio y recopilando datos críticos en tiempo real una visión holística de las operaciones.