En conversación con Tu Nuevo ADN, Luis Chavarría, representante en Chile del Observatorio Europeo Austral (ESO) se refirió a la llegada de los primeros espejos para la construcción del telescopio más grande del mundo en Antofagasta.
Esto, luego que durante la semana pasada, 18 segmentos del espejo del Extremely Large Telescope (ELT) llegaron a territorio nacional durante el pasado fin de semana. El ELT, está ubicado en el Cerro Armazones, pleno desierto de la región nortina.
Respecto a la llegada de los instrumentos, Chavarría manifestó que “son muy buenas noticias, no se nos quebró nada en el camino, así que estamos muy felices esperando la llegada del resto de los espejos durante este año”.
En esa línea, el astrónomo explicó que el tamaño de un telescopio se mide de acuerdo al diámetro de su espejo más grande. “Entonces, por eso estamos diciendo que estamos construyendo un telescopio óptico más grande del mundo, que va a tener un diámetro de 39 metros”, sostuvo.
En cuanto a la construcción del espejo, Chavarría explicó que “no podemos construir un espejo de ese tamaño en una sola pieza porque no resiste(…) Por eso construimos 798 segmentos hexagonales. Durante todo este año van a estar llegando distintos segmentos, más de 900 en total”.
Asimismo, detalló que luego de una serie de procesos, los espejos viajarán 10 mil kilómetros en barco hasta Paranal. “En Paranal nosotros tenemos un edificio grande, donde vamos a hacer un proceso de recubrimiento con plata cada 18 meses para mejorar la reflectividad”.
¿Qué se podrá observar a través del ELT?
Por otro lado, el astrónomo reveló que con este telescopio “queremos estudiar los dos extremos”. “Por un lado, el extremo más lejano para estudiar las primeras galaxias que se formaron cuando el universo era muy muy joven, y así poder saber cómo se formaron y si las leyes físicas eran las mismas que tenemos ahora”.
Por otro lado, “también vamos a poder estudiar las atmósferas de exoplanetas, que son planetas que giran alrededor de otras estrellas y no del Sol. Sabemos que hay algunos de esos planetas que son similares en tamaño a la Tierra y algunos de ellos se encuentran la zona habitable, es decir, que si esos planetas tuviesen agua, el agua estaría en estado líquido”, agregó.
Finalmente, el experto mencionó la importancia de cuidar los cielos y destacó la reciente norma de contaminación lumínica para poder estudiar de la mejor forma los fenómenos del universo. “Chile tiene que establecer cómo puede aprovechar esta enorme infraestructura científica”, concluyó.
