La minería en México se consolida como un sector estratégico para el crecimiento económico, al abarcar 192 sectores productivos y dinamizar más de 14 millones de empleos, según el estudio “Relevancia del sector minero mexicano en el desarrollo económico nacional”, elaborado por el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) en colaboración con la Cámara Minera de México (CAMIMEX).
El análisis, realizado por investigadores del CIDE, revela que la minería impulsa la economía a través de relaciones de encadenamiento hacia adelante y hacia atrás. Hacia adelante, abastece a 123 ramas de la economía que utilizan minerales como insumo básico, generando 4.3 millones de empleos y un valor de producción superior a los 10 billones de pesos. Hacia atrás, se vincula con 26 sectores proveedores que aportan 2.6 millones de empleos y más de 5 billones de pesos en producción.
Empleos y salarios por encima del promedio nacional
El estudio subraya que la minería genera más de 3 millones de empleos entre directos e indirectos, de los cuales 416 mil son directos con una remuneración promedio de $22,518 pesos mensuales, 30% superior al promedio nacional y muy por encima de la línea de bienestar.
Adicionalmente, la industria impulsa 43 ramas de servicios asociados, que generan casi 7 millones de empleos adicionales, lo que refleja su impacto transversal en la economía mexicana.
Pedro Rivero, presidente de CAMIMEX, destacó que la minería representa un pilar del desarrollo económico: “Su aporte del 4.7% al PIB nacional y su capacidad de generar empleos en zonas rurales demuestran que es un motor de bienestar y competitividad”.
Valor agregado y contribución fiscal
El documento explica cómo los minerales multiplican su valor a medida que se transforman en insumos industriales: la plata hasta 28 veces, el cobre 160 veces y el hierro más de 8,700 veces.
Asimismo, si la productividad minera aumentara un 10%, se generarían 34 mil nuevos empleos directos y 14 mil millones de pesos adicionales en contribuciones fiscales, que se sumarían a los 45 mil millones de pesos que el sector aportó en 2024.
Minería y competitividad en Norteamérica
El estudio enfatiza que más del 90% de las exportaciones mineras hacia Estados Unidos incorporan procesos de refinación y manufactura, lo que convierte a México en un proveedor clave de valor agregado dentro del marco del T-MEC.
Francisco Cervantes, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), señaló: “La capacidad de México para proveer insumos a través de los minerales refuerza su papel como socio industrial indispensable dentro del tratado regional”.
Por su parte, Alejandro Malagón, presidente de CONCAMIN, recordó que la minería es uno de los cinco sectores que más contribuyen al PIB industrial, con un 8.7%, al ser eslabón esencial de cadenas como la automotriz, electrónica, petroquímica y energética.
Retos y oportunidades para el sector
El CIDE advierte que para aprovechar el potencial de la minería es necesario consolidar una política industrial que impulse la innovación tecnológica en exploración geológica, promueva prácticas sostenibles, mejore la eficiencia regulatoria e integre a las comunidades locales en el desarrollo de proyectos.
Los autores concluyen que la minería no solo es fundamental para la economía mexicana, sino también para la competitividad e integración de Norteamérica, aportando insumos estratégicos que fortalecen la transición hacia industrias más complejas y tecnológicamente avanzadas.