Durante su presentación titulada «De promesa a producción: El largo viaje de un proyecto minero en el Perú», Carlos Gallardo, gerente general del Instituto Peruano de Economía (IPE), reveló que Perú encabeza la lista mundial de proyectos de cobre paralizados o con retrasos. Actualmente, el país representa el 22% de la producción potencial global detenida. De los 29 proyectos más importantes en esta situación, nueve se encuentran en territorio peruano, evidenciando los retos que enfrenta la minería nacional.
Entre estos proyectos paralizados destacan La Granja, Michiquillay, El Galeno y Conga en Cajamarca; Río Blanco en Piura; Los Chancas, Haquira y Trapiche en Apurímac; y Cañariaco en Lambayeque. Todos poseen un alto potencial productivo, pero permanecen en pausa debido a una combinación de factores sociales, ambientales, técnicos y regulatorios que dificultan su avance.
Gallardo subrayó que muchos de estos proyectos podrían estar activos si se contara con condiciones más competitivas y un entorno más favorable para la inversión minera en el país. Esto refleja la necesidad de mejorar el clima de negocios para destrabar estas iniciativas estratégicas.
El panorama global muestra que Perú no es el único afectado por retrasos en la minería. Estados Unidos concentra el 20% de la producción potencial paralizada, principalmente por los proyectos Resolution y Pebble. Argentina sigue con el 11%, debido a iniciativas como El Pachón, Los Azules y Agua Rica, mientras que Pakistán representa el 9% con el proyecto Reko Diq.
Otros países con proyectos mineros importantes detenidos incluyen Ecuador (7% con Llurimagua), Papúa Nueva Guinea (7%, Frieda River, Wafi-Golpu y Yandera), Filipinas (6%, Tampakan), Chile (6%, Los Helados), así como Colombia y Panamá, cada uno con un 5%, y Afganistán con un 3%, reflejando un fenómeno global que afecta la industria minera en distintas regiones.