Este jueves se anunció la adjudicación del Anillo Vial Periférico al consorcio español integrado por las empresas Cintra, Acciona y Sacyr. Ellos tendrán a cargo el diseño, financiamiento, construcción, operación y mantenimiento del megaproyecto que promete mejorar el tránsito en Lima.
La autopista de 34.8 kilómetros de longitud es el proyecto más grande adjudicado en los últimos 10 años en el país y tendrá un costo total de US$ 3,400 millones, mientras que el plazo de concesión será de 30 años.
De acuerdo con Luis del Carpio, director de la Dirección Especial de Proyectos de Proinversión, esta nueva obra que atravesará 12 distritos entre el Callao y Lima generará un gran cambio en la forma como se desplaza la población para ir a sus destinos.
Por ejemplo, movilizarse desde Ate-Vitarte hasta Independencia tomará menos de 15 minutos cuando actualmente tarda 60 minutos. Igualmente, trasladarse de San Juan de Lurigancho hasta Independencia tomará solo 5 minutos y desde Ate a San Jun de Lurigancho en solo 10 minutos.
Del Carpio dijo que la infraestructura de la ciudad de Lima no haya crecido al mismo ritmo del crecimiento poblacional, lo cual ha hecho que los pasajeros se demoren dos y hasta tres horas para llegar a sus destinos. “Lo peor de todo es que nos hemos acostumbrado a eso”.
“Este Anillo Vial Periférico le dará a casi 5 millones de limeños calidad de vida que necesitan y la posibilidad de conectarse con el resto de la ciudad porque ahora muchos de nosotros, salvo que sea para trabajar, no nos conectamos con la otra parte de Lima porque se hace difícil atravesarla de un lado a otro”.
