La operación, que implicó un desembolso de 400 mil dólares en efectivo, representa un paso firme en la estrategia de expansión territorial y exploratoria de la compañía. Gracias a esta adquisición, Luca Mining aumenta en más del 25% la extensión total de su paquete de terrenos en Tahuehueto, alcanzando aproximadamente 10,000 hectáreas. Un aspecto clave del acuerdo es la ausencia de regalías sobre el retorno neto de fundición (NSR), lo que mejora directamente el valor económico del activo recién adquirido.
Dan Barnholden, director ejecutivo de la minera canadiense, enfatizó que esta incorporación refuerza la visión a corto plazo de la empresa, centrada en aumentar el potencial de exploración sin sacrificar la eficiencia operativa. A su vez, Paul D. Gray, vicepresidente de exploración, destacó que el terreno recién incorporado no solo amplía el perímetro de operaciones, sino que también abre oportunidades geológicas prometedoras para identificar nuevos cuerpos minerales de valor.
Tahuehueto es una mina de oro y plata de alta ley que alcanzó la producción comercial en abril de 2025. Desde entonces, el proyecto ha demostrado estabilidad técnica y económica, con una proyección de producción de entre 85,000 y 100,000 onzas equivalentes de oro para este año, de las cuales entre 65,000 y 80,000 serán onzas pagaderas. Estos números ubican a la mina como uno de los desarrollos de mayor relevancia en la minería aurífera subterránea en el país durante los últimos meses.
El momento de esta adquisición no es casual. Se dio a conocer apenas unos días después de que la compañía publicara resultados alentadores de perforación en su otra operación mexicana, Campo Morado, en el estado de Guerrero. Esos informes revelaron nuevas zonas mineralizadas de oro y plata, lo que podría traducirse en una extensión de la vida útil de la mina y una mejora en su rentabilidad a mediano plazo. El enfoque agresivo de Luca Mining en exploración evidencia una estrategia clara: consolidarse como un actor relevante en el ámbito de metales preciosos en México, mediante una combinación de operaciones activas y adquisición de activos clave.
La región de Tahuehueto ha sido históricamente reconocida por su potencial aurífero. Su geología está compuesta por estructuras epitermales de alta sulfuración, ideales para la formación de vetas de oro y plata. Al incorporar terrenos circundantes como Humaya 3, la compañía no solo gana acceso físico al subsuelo adyacente, sino también la posibilidad de diseñar campañas de perforación más integradas, eficientes y menos costosas.
No hay que perder de vista el papel de Fresnillo, el vendedor de esta concesión. La empresa, que forma parte del grupo Industrias Peñoles, posee una cartera de proyectos de clase mundial y mantiene un enfoque en activos de mayor escala y eficiencia. La cesión de Humaya 3 podría entenderse como parte de una estrategia de optimización de portafolio, enfocando esfuerzos en operaciones con mayor madurez o rentabilidad comprobada. Para Luca, sin embargo, este tipo de activos pueden representar oportunidades de crecimiento sustancial.
En el contexto actual de precios sólidos para el oro y la plata, especialmente ante la incertidumbre macroeconómica global, decisiones como esta demuestran la relevancia estratégica de asegurar terrenos con potencial geológico en regiones mineras consolidadas como lo es Durango. En efecto, la zona forma parte del Cinturón de Oro de la Sierra Madre Occidental, una de las franjas metalogénicas más ricas de América.
Desde una perspectiva más amplia, esta operación también es un recordatorio de la importancia que México sigue teniendo para la minería internacional. La estabilidad geológica, la experiencia técnica local y la infraestructura existente continúan atrayendo inversiones canadienses, aun en un clima regulatorio que en ocasiones ha generado incertidumbre. El mensaje parece claro: cuando los activos son buenos, y la estrategia es sólida, el riesgo se convierte en oportunidad.
Aunque aún falta por ver qué descubrimientos podrían emerger de los nuevos terrenos, el historial de Luca Mining en desarrollo y exploración sugiere que este movimiento podría traducirse en nuevos recursos para Tahuehueto. La combinación de producción en curso, ampliación de terrenos y éxito en exploración reciente en Guerrero posiciona a la empresa en un momento de inflexión positiva.
Por lo pronto, la empresa cuenta con el respaldo de la infraestructura operativa en marcha y una creciente experiencia en el terreno mexicano. Si el mercado acompaña y las perforaciones confirman su potencial, la historia de Luca en México apenas comienza.