Con una producción mensual de 3,065 kilogramos de oro y 178,069 kilogramos de plata, la entidad ocupa el primer lugar nacional en la extracción de metales preciosos, así como en la producción de minerales industriales como plomo y zinc. Asimismo, se posiciona en el segundo lugar en la producción de cobre, reafirmando su liderazgo en el sector minero.
Este desempeño sobresale no solo por su impacto económico, sino también por el crecimiento sostenido que ha mostrado la industria minera en la entidad. En comparación con el mismo periodo de 2023, Zacatecas registró incrementos del 13.6 % en la producción de oro, 32.5 % en la de plata, 57.7 % en la de zinc y 20.3 % en la de plomo.
Este liderazgo es resultado del trabajo conjunto entre el Gobierno de Zacatecas y el sector minero, así como del fortalecimiento de la confianza empresarial en la administración encabezada por el gobernador David Monreal Ávila.
Bajo esta visión, la minería es uno de los ejes tractores de la economía estatal, ya que no solo genera riqueza, sino también bienestar y oportunidades para las familias zacatecanas.
El gobernador David Monreal Ávila ha subrayado en diversas ocasiones que los beneficios de la minería son invaluables cuando se desarrollan bajo un esquema de coordinación, sostenibilidad y armonía entre el gobierno, la industria y las comunidades. Este enfoque busca no solo maximizar la productividad del sector, sino también garantizar que los beneficios lleguen a todas las regiones del estado.
El secretario de Economía, Jorge Miranda Castro, reconoce la importancia de este sector y su impacto en la economía estatal, por lo que continuará impulsando su desarrollo y fortalecimiento para maximizar sus beneficios en Zacatecas.
Entre las acciones estratégicas promovidas por la actual administración en el sector minero destaca el Programa para el Desarrollo de Proveedores Locales, iniciativa liderada por la Secretaría de Economía.
Este programa tiene como objetivo fortalecer la participación de los proveedores zacatecanos en las cadenas de valor del sector minero, impulsando el empleo, el desarrollo económico y el bienestar social en las comunidades.
La integración de proveedores locales no solo optimiza los procesos para las empresas mineras, sino que también genera un círculo virtuoso: crea empleos bien remunerados, dinamiza la economía local y fortalece la capacidad productiva del estado. Además, fomenta un desarrollo equilibrado en las comunidades cercanas a los centros de extracción, contribuyendo al bienestar de sus habitantes.