El nuevo puerto de Manzanillo, que se desarrollará en la Laguna de Cuyutlán, requerirá de una inversión público-privada de 63,000 millones de pesos y promete revolucionar el panorama portuario de México, está en marcha.
La Secretaría de Marina (Semar) recibirá el próximo 13 de diciembre las propuestas técnicas y económicas de las empresas interesadas en elaborar el proyecto ejecutivo para el diseño de muelles de la etapa I mediante tablestacado y dragado de construcción de la Administraciones del Sistema Portuario Nacional (Asipona) Manzanillo.
“De la alternativa seleccionada, se desarrollará una propuesta de solución de detalle a nivel ejecutivo de la problemática planteada para la ampliación del canal de navegación principal, que haga posible su adecuación en campo”, informó la dependencia.
En una superficie de 1,800 hectáreas (el actual puerto tiene una extensión de 450 hectáreas) se instalarán terminales especializadas de petrolíferos de Pemex (distribución y almacenamiento) que permitirán recibir hasta cinco buques petroleros simultáneamente, duplicando la capacidad de las actuales, y dos terminales especializadas en contenedores en las que podrán operar hasta tres megabuques simultáneamente con un volumen anual de cinco millones de contenedores, consolidando a Manzanillo como un líder en el comercio internacional, principalmente asiático.
Adicionalmente se incrementará la infraestructura aduanera para facilitar las operaciones comerciales y ubicarlo en los siguientes seis años en el puerto número de América Latina, actualmente es el tercero, en línea con los objetivos de la Presidenta Claudia Sheinbaum, que el pasado 23 de noviembre anunció el inicio de los trabajos.
“El camino hacia el puerto Nuevo Manzanillo nos permite como institución demostrar que el impulso marítimo contribuye a mejorar la calidad de vida de las y los habitantes de la región, y permite el desarrollo integral en el país, logrando con ello fincar una nación con valores, con principios éticos sólidos, sin discriminación y sin exclusiones”, dijo entonces el titular de la Semar, el Almirante Raymundo Pedro Morales Ángeles.
Los trabajos a realizar
De acuerdo con la Secretaría de Marina, la fecha del fallo de la licitación pública será el 20 de diciembre con la intención de iniciar los trabajos tres días después y terminarlos a más tardar en 150 días naturales.
La empresa ganadora recibirá un anticipo del 30% del monto total del contrato (estimado en 40 millones de pesos) y deberá amortizar en su totalidad los trabajos a realizar el siguiente año, toda vez que no se cuenta con la aprobación del presupuesto que se asignará a la dependencia en el 2025.
“El horario de trabajo será diurno y vespertino, se deberán considerar jornadas de trabajo de ocho horas y una hora de comida, en el horario comprendido entre las 08:00 y las 17:00 horas, de lunes a viernes. Los sábados se podrá laborar de 8:00 a 15:00 horas. No obstante, quedará a juicio de la entidad (Semar), la suspensión de actividades”, se precisó a los interesados.