Pemex se prepara para un nuevo desafío con la perforación del pozo Kuajtla 1, el cual será el más profundo de México. La empresa mexicana espera llegar a una profundidad de 8,900 metros en aguas profundas del Golfo de México, específicamente en el Cinturón Plegado Perdido. Este ambicioso proyecto requerirá una inversión superior a los 177 millones de dólares, según el plan aprobado por la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
La relevancia estratégica de Kuajtla 1
Kuajtla 1 marca un hito en la historia de Pemex. No solo por ser el pozo más profundo, sino porque representa el retorno de la petrolera a la exploración en aguas profundas. El Cinturón Plegado Perdido ha sido identificado como una de las áreas más prometedoras en términos de reservas de hidrocarburos. Su proximidad al megayacimiento de Trión, conocido por sus gigantescas reservas, refuerza el potencial de Kuajtla 1.
Rodrigo Hernández Ordóñez, titular de la Unidad Técnica de Exploración y su Supervisión, enfatizó la importancia de este proyecto. Según Hernández Ordóñez, Pemex espera encontrar reservas de petróleo crudo equivalente en el orden de centenas de millones de barriles, lo que superaría considerablemente las expectativas habituales para proyectos de exploración.
“Este pozo será el primero en alcanzar tal profundidad en México, lo que lo convierte en un proyecto clave para la industria nacional y para la compañía”, afirmó Hernández Ordóñez.
Exploración en aguas profundas, un cambio de rumbo
Durante los últimos años, Pemex había enfocado sus esfuerzos en la exploración de aguas someras y en tierra firme. Sin embargo, la perforación de Kuajtla 1 representa un cambio estratégico hacia la exploración de aguas profundas. Este tipo de exploración resulta crucial para Pemex, ya que se estima que una gran parte de las reservas de hidrocarburos de México se encuentran a estas profundidades.
Salvador Ortuño Arzate, especialista en recursos energéticos, subrayó la importancia del área donde se perforará el pozo. “El área es altamente prospectiva por la probabilidad de encontrar importantes recursos de hidrocarburos, ya que se han registrado numerosas emanaciones en la zona”, explicó Ortuño Arzate.
Lecciones del pozo Iklum y proyecciones para Kuajtla 1
En junio pasado, Pemex anunció la perforación del pozo Iklum, un proyecto que buscaba alcanzar los 8,240 metros en tierra firme, lo que habría establecido un récord en términos de profundidad. Aunque Iklum no llegó a perforarse a esa profundidad, proporcionó valiosa información geológica. Esto ha permitido a los ingenieros de Pemex ajustar sus técnicas de perforación para maximizar las posibilidades de éxito en Kuajtla 1.
Valdemar Hernández Márquez, comisionado de la CNH, resaltó que aunque aún es temprano para hablar de la rentabilidad del proyecto, la probabilidad de éxito es alta. “Kuajtla 1 no solo brindará más información sobre las características geológicas de la zona, sino que también permitirá mejorar las técnicas para la exploración a grandes profundidades”, señaló.
El campo de Trión, cercano a la ubicación de Kuajtla 1, ya ha demostrado ser altamente productivo, con una proyección de 120,000 barriles de aceite al día y 100 millones de pies cúbicos de gas. La cercanía geográfica entre ambos campos alimenta las expectativas de que Kuajtla 1 pueda contar con reservas similares.
Implicaciones para la industria energética de México
Este proyecto también tiene una importancia estratégica para el futuro de la industria petrolera mexicana. Agustín Díaz Lastra, presidente de la CNH, enfatizó la necesidad de continuar explorando en busca de nuevas reservas que puedan sostener la producción a largo plazo. La perforación de Kuajtla 1 permitirá evaluar el sistema petrolero en la región y podría tener un impacto positivo en las reservas de hidrocarburos del país.
“El potencial de Kuajtla 1 es comparado con el de Trión, uno de los campos más importantes del país. Es fundamental seguir adelante con estos proyectos para garantizar el abastecimiento de energía a futuro”, afirmó Díaz Lastra.
A largo plazo, la perforación de pozos como Kuajtla 1 podría ayudar a Pemex a cumplir con las metas de producción establecidas por el gobierno, que busca alcanzar los 1.8 millones de barriles diarios. Sin embargo, Pemex también enfrenta importantes desafíos financieros, con una deuda que asciende a 100 mil millones de dólares.
La perforación del pozo Kuajtla 1 representa un avance significativo en la estrategia de Pemex para explorar y desarrollar reservas en aguas profundas. El éxito de este proyecto podría transformar el panorama energético de México, abriendo nuevas oportunidades para la extracción de hidrocarburos a gran escala. Pemex continúa apostando por proyectos de exploración ambiciosos, que podrían consolidar su posición como uno de los principales actores en la industria petrolera mundial.