El Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras) ha desempeñado un papel relevante en el financiamiento y construcción de los proyectos prioritarios del gobierno que está por concluir, tal es el caso del Tren Maya.
De acuerdo con el sexto informe de gobierno presentado este domingo, en dichos proyectos estratégicos se involucró la participación del sector privado, así como del Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin).
Ahí, se precisa que de diciembre del 2018 a junio del 2024, se desembolsaron poco más de 483,000 millones de pesos para diversos proyectos prioritarios, entre los que destacaron los trenes Maya, Interurbano México-Toluca, el Suburbano y las refinerías de Tula y Salina Cruz.
Impulso a infraestructura
El documento señala que en el 2024, Banobras siguió con el impulso a un mayor acceso al crédito para proyectos de infraestructura.
Detalla que, en este sentido, se otorgó crédito directo e inducido al sector privado por 47,963 millones de pesos entre enero y junio, lo que se tradujo en un saldo de crédito directo e inducido de 615,911 millones de pesos.
De dicha cartera, el 58.4% se canalizó a estados y municipios, y el 41.6% a proyectos de infraestructura de los sectores de energía, carretero, intermediarios financieros, seguridad y justicia, agua, transporte y telecomunicaciones.
Inclusión financiera e impulso al nearshoring
El informe agrega que en junio del 2024, Banobras contó en su cartera de crédito con un total de 415 municipios, de los cuales el 26% pertenecieron a la región Sur-Sureste, y de estos el 64% a comunidades que tienen grado de marginación medio, alto o muy alto.
Asimismo, menciona que como resultado de la relocalización de empresas, nearshoring, donde las compañías globales comenzaron a replantear su estrategia de relocalización geográfica, se identificaron en México 12 entidades federativas con vocación industrial.
Derivado de ello, puntualiza, se impulsó el desarrollo y construcción de la infraestructura necesaria para aprovechar las oportunidades del nearshoring, y se participó en el financiamiento de obras y proyectos mediante vertientes como: infraestructura logística, provisión de servicios para la industria, y centros de desarrollo urbano e infraestructura de última milla.
De esta forma, enfatiza, se asignó financiamiento por 8,703 millones de pesos, principalmente para el desarrollo de infraestructura que permita mejorar la conectividad entre las regiones e incrementar la competitividad de las mismas.
