Uno de los edificios actualmente en construcción del polígono industrial de Arinaga (municipio de Agüimes, sureste de Gran Canaria), promete ser distinto a todo lo que le rodea. A cualquier otro edificio fabricado hasta la fecha, en realidad. Evocons, la empresa constructora, usa en el proyecto una tecnología propia de impresión 3D que ha bautizado como Evoconstructor con la que, según asegura su fundador y consejero delegado, Daniel Lorenzo, automatiza y digitaliza hasta un 60% del proceso de construcción directamente en la obra. El resultado, según ha declarado este jueves a los medios de comunicación, será una reducción de hasta cuatro veces en los tiempos de construcción y un ahorro de costes entre un 25% y un 30%. La patente está registrada en China, India, Brasil, Europa y EE UU.
“Esta es una tecnología que viene a disrumpir muy fuertemente el mercado”, ha subrayado Lorenzo. “Esperamos que este sea el inicio de varios pilotos que permitan que la tecnología se vaya abriendo poco a poco, vaya llegando a todos los constructores, a los promotores e, incluso, las Administraciones Públicas. El objetivo es que hagan uso de sus ventajas, que se aprovechen de la reducción de costes y así, se alivie el problema de la vivienda, entre otros”.
El sistema, explica la compañía en su dosier informativo, permite edificar hasta 40 metros de altura. Está compuesto por un pórtico robótico con seis ejes de movimiento —los tradicionales X, Y y Z y otros tres ejes adicionales para el uso de herramientas automatizadas (A, B y C)— y una serie de sistemas auxiliares. Con ellos se transforma un modelo 3D cargado en su software en la estructura física del edificio. La máquina imprime primero los encofrados de cimentación. Después se colocan de forma manual las armaduras, se hormigona y se procede a la nivelación del suelo “gracias a su kit de herramientas automatizado”. A continuación, se imprimen las paredes del edificio, incluyendo tabiques interiores y huecos de ventanas, capa por capa hasta alcanzar la altura deseada. El proceso finaliza con la colocación de azulejos o pavimento de forma automatizada y con la ejecución del forjado. “Gracias a la utilización de la robótica y el machine learning [aprendizaje automático, un subcampo de la inteligencia artificial que permite que un sistema aprenda y mejore de forma autónoma], la maquinaria cuenta con información en tiempo real de cada uno de los procesos, y controla el material que necesita utilizar en cada fase, reduciendo costes y minimizando riesgos”, concluye Evocons.
“Esto no es simplemente una máquina que imprime paredes, como el resto de tecnologías que hay a nivel global”, ha explicado Lorenzo. Su disposición de columnas y su brazo robótico “permiten llegar a la pared y automatizar tareas de acabados una vez la pared ha sido impresa. Ese es, digamos, el quid de la patente y el quid de la tecnología”.
El inmueble presentado este jueves en Agüimes ha sido promovido por la Entidad de Conservación de la Zona Industrial de Arinaga (Ecoaga), para albergar una sala cultural y de exposiciones, además de vestuarios y un baño público. La edificación consta de dos volúmenes distribuidos alrededor de un patio interior ajardinado. Uno de los edificios tendrá dos plantas diáfanas, mientras que el segundo constará de una única planta y contará con una fachada curva. La obra cuenta con un presupuesto de 149.999,58 euros, y su finalización está prevista para finales de año.
Daniel Lorenzo es actualmente el titular del 100% de las acciones de Evocons. La empresa tiene abierta en la actualidad una segunda ronda de financiación, por lo que hay una parte minoritaria del capital comprometido con un tercero.
Fuente: Cinco Días, El País