Debido a los esfuerzos globales por reducir las emisiones de carbono, el cobre desempeña un papel importante en la transición energética al ser un componente esencial de vehículos eléctricos, paneles solares y otras nuevas tecnologías de energía renovable.
Credicorp Capital indica en su último reporte sobre el cobre que la demanda del metal se duplicará para el 2035.
Además, pronostica que la industria no podrá satisfacer la creciente demanda del metal, por lo que la escasez impulsará un aumento en su precio.
Afirma que China es el mayor consumidor de cobre del mundo con una demanda de aproximadamente el 50% de la producción mundial del metal, por ello, las proyecciones de crecimiento del país asiático podrían afectar a las perspectivas del cobre en Latinoamérica.
“El país asiático ha sido resiliente, pues su PBI, excluyendo el sector inmobiliario, creció 5.6% en el 2023, destacando la contribución del sector manufactura relacionado a energías renovables y vehículos eléctricos”, refirió.
En esa línea, Credicorp Capital anota que la demanda relacionada a vivienda en el país se compensa con la relacionada a la transición energética, por lo cual no se considera que China sea un detractor de las perspectivas de alza del precio del metal.
“Por otro lado, se espera una recuperación en la demanda de cobre de economías desarrolladas como Europa y América del Norte, los cuales representan el 16% y 10% de la demanda mundial del metal, respectivamente”, apunta.
Conforme la transición hacia energías renovables y electrificación se acelere en el mundo, la demanda de cobre seguirá aumentando, prevé Credicorp Capital.
Actualmente, continúa, se estima que el 15% de la demanda global de cobre viene por la transición energética y se espera que este porcentaje sea 18% para el 2025 y 23% para el 2030.
Por su parte, las perspectivas de producción no están siguiendo el mismo ritmo, pues se espera un déficit de oferta de 400 kt en el 2024, señala.
¿Qué reflejan los mercados?
Por último, en el reporte se indica que en las últimas semanas el mercado ha empezado a reconocer un valor relevante en las empresas productoras de cobre, evidenciando una fuerte entrada de flujos de compra en estas acciones.
El ETF Global X Copper Miners (COPX) compuesto por mineras de cobre ha tenido un rendimiento de más de 16% en marzo (hasta el 16).
Este rally ha llevado a que, en términos de valorización, el promedio de empresas cupríferas latinoamericanas trance a múltiplos EV/EBITDA para el 2024, por encima de su promedio histórico de los últimos cinco años.
El ciclo del cobre al alza está iniciando y es un momento adecuado para invertir y tener exposición en empresas productoras del metal, según el banco de inversión.