El golpeado sector inmobiliario comienza a ver luces de esperanza. Las tasas de los créditos hipotecarios promediaron 4,96% a principios de febrero, cerrando su quinta semana consecutiva a la baja. Sin embargo, de acuerdo a los expertos, esto no tiene un efecto tan relevante como para marcar un cambio positivo en el sector.
“Aunque se espera que las tasas hipotecarias sigan a la baja, se estima que este 2024 las tasas oscilarán en niveles semejantes al promedio del año pasado, cercano al 4,5%”, señala Reinaldo Gleisner, Vicepresidente de Colliers.
El esperado alivio del sector inmobiliario, en crisis desde el estallido social, todavía no llega. Y, pese a que las tasas hipotecarias seguirán descendiendo de la mano de la TPM y de las tasas internacionales, ese movimiento todavía no sería relevante para marcar un giro en la industria.
“Sin duda, la baja en la tasa hipotecaria después de un alza de varios meses es relevante, ya que ésta llegó a niveles solo comparables con los de comienzos de la década de 2010. No obstante, debe considerarse que los dividendos entre el año 2019 y 2023 subieron más de un 30%, un movimiento mucho mayor que la baja reciente”, explica Gleisner.
Según los expertos, el repunte de la tasa no asegura que el sector deje atrás su crisis, puesto que, aunque se espera que la tasa continué bajando, difícilmente se podría llegar a tasas similares a las de fines de 2019.
Respecto a las rentabilidades del sector, Gleisner señala que actualmente se están viendo rentabilidades promedio de UF+6,5%, un desempeño que se da en medio de una castigada valorización para los activos en términos históricos, y bajo una debilidad económica que genera dudas en la mantención de los niveles de renta.
