Expertos recomendaron el cierre del puente Barragán que une a los departamentos del Quindío y el Valle de Cauca, a tan solo un mes de estar operando. Así lo anunció el gobernador Roberto Jairo Jaramillo Cárdenas, quien mostró preocupación por la decisión.
La suspensión del tránsito sería necesaria para demoler una de las bases de la obra, que fue reabierta el 24 de julio, tras nueve meses de bloqueo. Esto complicaría la circulación vial entre ambas regiones, dado que la estructura de El Alambrado sigue sin operar.
Tras el colapso de este último, la Agencia Nacional de Infraestructura y Autopistas del Café trabajan en su reconstrucción y el paso se habilitaría en octubre. Así las cosas, la propuesta es aplazar el cierre del Barragán hasta la reinauguración de El Alambrado.
“Le estamos pidiendo al Gobierno nacional que nos den espera hasta el 11 de octubre que tengamos el puente del Alambrado funcionando porque no podemos volver a interrumpir la comunicación entre estos dos departamentos”, manifestó el mandatario del Quindío.
Aunque la intervención estaría justificada en términos de prevención, cada vez más toma respaldo la iniciativa de Jaramillo Cárdenas. Desde el Valle del Cauca también se pidió que, para bloquear el tránsito, no puede haber incertidumbre en la movilidad.
Vale la pena aclarar que, de momento, por el puente Barragán solo pueden circular vehículos livianos que no superen las 17 toneladas de peso, entre las seis de la mañana y las ocho de la noche. Los demás, deben buscar las vías alternas de la región.
La entidad encargada del mantenimiento de la obra no ha especificado la fecha en la que se hará el cierre, ni ha suministrado detalles de las complicaciones que identificaron los ingenieros en el proyecto, pero, desde ya, la decisión es impopular entre los gremios.
