En el marco de Slope Stability 2026, el geotécnico Marco Arrieta llamó a cerrar brechas entre diseño y operación mediante integración de datos, estandarización del GCMP y uso de tecnologías accesibles como fotogrametría, nubes de puntos y tableros operacionales
La gestión geotécnica en Perú enfrenta hoy una brecha crítica: transformar el alto nivel técnico del diseño y modelamiento en un control del terreno consistente durante la operación. Así lo planteó el ingeniero geotécnico Marco Arrieta durante el webinar “Del diseño y el modelado a las operaciones: Plan práctico de gestión del control del terreno (GCMP) para operaciones mineras activas”, realizado como actividad previa al congreso internacional Slope Stability 2026.
Arrieta sostuvo que el reto principal no está en la ingeniería de escritorio, sino en “llevar ese estándar al día a día” de la faena, integrando información, revisando supuestos y asegurando disciplina operacional entre turnos y contratistas.
Brechas identificadas en el control del terreno
El especialista subrayó tres vacíos recurrentes en minas peruanas:
- Falta de integración efectiva de datos. Información de radares, drones, instrumentación geotécnica y topografía suele quedar dispersa, sin converger en un sistema centralizado que respalde decisiones rápidas.
- Variabilidad en la ejecución del GCMP. Aunque existe capacidad técnica, los procedimientos de control del terreno aún muestran diferencias entre guardias, áreas operativas y empresas contratistas, afectando la consistencia del manejo de riesgo.
- Actualización insuficiente de modelos. La falta de ciclos sistemáticos para actualizar modelos geológicos y geotécnicos limita la detección temprana de cambios relevantes en taludes, botaderos y frentes activos.
A esto se suman factores culturales: registrar y aprender de deformaciones tempranas o eventos menores aún no está plenamente internalizado, mientras que la presión por metas productivas puede tensionar los requerimientos del plan de control del terreno, sobre todo en operaciones de geometría compleja.
Tecnología accesible como acelerador de madurez
Para cerrar estas brechas, Arrieta propuso avanzar hacia una visión unificada de gestión geotécnica, apoyada por:
- Plataformas digitales integradas que unifiquen monitoreo, mapeos de peligros y criterios de acción.
- Estandarización formal del GCMP y revisiones externas periódicas para asegurar consistencia y mejora continua.
- Capacitación transversal para operaciones, planificación y contratistas, instalando el control del terreno como “responsabilidad compartida”.
Un punto clave fue la adopción de tecnologías de menor barrera de entrada —pero alto impacto— como fotogrametría, nubes de puntos actualizadas y tableros operacionales (dashboards), herramientas que permiten detectar cambios de manera temprana y convertir datos en decisiones prácticas dentro de la operación.
Un debate estratégico rumbo a Slope Stability 2026
Slope Stability 2026 es uno de los encuentros más relevantes a nivel mundial en estabilidad de taludes mineros y gestión geotécnica aplicada. Las actividades previas —como este webinar— buscan justamente acelerar la transferencia desde el conocimiento técnico hacia la realidad operacional, especialmente en países con gran actividad minera como Perú.
La conclusión del especialista fue directa: Perú tiene el nivel técnico para el diseño, pero necesita dar un salto en el control operativo del terreno, integrando tecnología, datos y cultura de riesgo de forma sistemática. “Estas brechas abren una oportunidad clave para impulsar mejoras integrales en la gestión geotécnica a nivel nacional”, remarcó.


