La empresa A.P. Moller – Maersk inauguró un nuevo depósito logístico en Manzanillo, Colima, con una inversión superior a 15 millones de dólares, como parte de su estrategia para fortalecer la red logística de México y mejorar la eficiencia en uno de los principales puertos del país, que concentra cerca de la mitad de la carga contenerizada nacional.
Infraestructura clave para la competitividad logística
Ubicado a cinco kilómetros del Puerto de Manzanillo, el nuevo depósito cuenta con una superficie de 31 mil metros cuadrados y una capacidad para 6,018 TEUs, lo que permite reducir cuellos de botella en la primera y última milla, así como agilizar el movimiento de mercancías hacia los principales corredores industriales del país, incluido el Bajío y el centro de México.
La instalación está diseñada para atender carga seca, refrigerada, gensets y cajas de 53 pies, además de disponer de 50 conexiones para contenedores refrigerados y 60 posiciones para mantenimiento y reparación, lo que fortalece la resiliencia operativa de las cadenas de suministro en un nodo estratégico para el comercio internacional.
De acuerdo con Patricia Pérez Salazar, directora general de Maersk en México, esta inversión refleja el compromiso de la empresa con el crecimiento de largo plazo del país. “Al ofrecer servicios integrados, ayudamos a nuestros clientes a simplificar sus cadenas de suministro y a fortalecer su competitividad en los mercados nacionales e internacionales”, señaló.
Entre los servicios que ofrece el nuevo depósito destacan el shunting, que reduce tiempos muertos de los camiones en las terminales portuarias; el transloading para carga seca y refrigerada; la gestión de contenedores para optimizar inventarios; así como mantenimiento especializado para equipo seco y reefer, lo que impacta directamente en la reducción de costos logísticos.
Para Getulio Centanaro Patino, head of Logistics and Services de Maersk en México, la última milla representa uno de los mayores retos de la logística moderna. “Con esta instalación creamos agilidad donde más se necesita, aceleramos tiempos de tránsito y damos mayor control a las empresas sobre su carga”, afirmó, al destacar la preparación de la compañía ante el incremento de demanda previsto para 2026 en sectores como retail, tecnología y consumo.
Presencia consolidada y planes de expansión
La huella de Maersk en México incluye más de 59 mil metros cuadrados de almacenes en Ciudad de México y Tijuana, además de 250 mil metros cuadrados de capacidad en depósitos ubicados en Cuautitlán, Lázaro Cárdenas y Manzanillo, así como hubs de carga aérea en Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara. La empresa anticipa nuevas expansiones logísticas en Guadalajara y Monterrey, con énfasis en el comercio transfronterizo México–Estados Unidos.
Con esta inversión en Manzanillo, Maersk consolida su papel como actor clave del ecosistema logístico nacional, impulsa la eficiencia del comercio exterior y refuerza el posicionamiento de México como plataforma estratégica para el comercio global.
Acerca de Maersk
A.P. Moller–Maersk es una empresa global de logística integrada que opera en más de 130 países y emplea a alrededor de 100 mil personas, con un enfoque en conectar y simplificar las cadenas de suministro de sus clientes a nivel mundial. La compañía ofrece soluciones que integran transporte marítimo, servicios terrestres, carga aérea, almacenamiento y gestión logística, lo que le permite atender de forma integral a sectores clave del comercio internacional. En México, Maersk mantiene una presencia estratégica con infraestructura logística, centros de almacenamiento y depósitos en puntos clave del país, alineada con su estrategia de crecimiento de largo plazo, eficiencia operativa y sostenibilidad, que incluye el objetivo de alcanzar cero emisiones netas de gases de efecto invernadero para 2040.
