Con una inversión de 40 millones de dólares, la empresa coreana SHPAC colocó la primera piedra de su nueva planta en León, Guanajuato, proyecto que generará 120 empleos directos y refuerza la vocación industrial del estado. Esta decisión empresarial confirma el atractivo de Guanajuato para la instalación de operaciones manufactureras de alto valor.
La llegada de SHPAC, firma de origen coreano, contó con la presencia de autoridades estatales en representación de la gobernadora Libia Dennise. Durante el evento se resaltó la confianza de la compañía en el entorno económico de Guanajuato y en la capacidad productiva de León, ciudad con trayectoria en manufactura y servicios vinculados con la industria.
SHPAC impulsa la industria metalmecánica en León
La nueva planta de SHPAC fortalecerá la industria metalmecánica mediante la producción de componentes especializados para proyectos de infraestructura y construcción. La compañía sumará proveedores locales y regionales, lo que expandirá la cadena de valor y abrirá oportunidades para pequeñas y medianas empresas que participan en el sector industrial del Bajío.
Además, el proyecto de 40 millones de dólares facilita una mayor integración entre la industria metalmecánica y el sector de la construcción, rubros con papel estratégico en la dinámica económica de Guanajuato. La instalación de esta planta refuerza la posición del estado como destino competitivo para la inversión productiva en México y fortalece su presencia en mercados internacionales.
Más empleos y competitividad para Guanajuato
Con la creación de 120 empleos directos, SHPAC aportará oportunidades laborales especializadas para el talento de León y municipios cercanos. La empresa prevé esquemas de capacitación técnica en procesos metalmecánicos, lo que se traduce en mayor productividad, mejores perfiles laborales y un entorno más competitivo para la industria regional.
La inversión de esta compañía de origen coreano fortalece la diversificación industrial de Guanajuato y acompaña nuevos proyectos vinculados con la construcción y la infraestructura. Con decisiones de negocio de este perfil, el estado consolida su competitividad a nivel mundial y eleva su atractivo frente a otras regiones que compiten por capital, empleo especializado y desarrollo de cadenas de suministro de largo plazo.



